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Blog pensado para ir publicando alguna información interesante o noticias que sucedan en nuestra diócesis de Orihuela-Alicante y que tenga que ver con este reciente Ordo Diaconal que existe desde el 26 de Diciembre de 2007.

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Hemeroteca


Parte de la Hemeroteca que se publicó en la primera ordenación fue esta:

El ABC.es publicó:

El obispo de Alicante ordena a sus tres primeros diáconos Luis Manuel Da Silva Tajuelo, Manuel Cosme García Vaíllo y Francisco Juan López Albaladejo (en la imagen) fueron ordenados ayer como diáconos permanentes por el obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, en la catedral oriolana. Es la primera vez que este obispado designa diáconos, que sin ser sacerdotes tendrán la facultad de bautizar, casar, celebrar exequias y llevar la comunión a los enfermos. En la actualidad se preparan otros cinco candidatos.

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También publicó el ABC.es esta noticia, igual fue publicada también por Panorama-actual.es en la sección sociedad, al igual que Valencia hui, el diari de nostre regne, publicó:

Tres casados serán los primeros diáconos de la Diócesis de Orihuela-Alicante

El obispo de Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, ordenará hoy a los tres primeros diáconos permanentes de su Diócesis, en una ceremonia que tendrá lugar en la catedral oriolana, según anunciaron ayer fuentes del Obispado en un comunicado. La ordenación de los diáconos, tres «cristianos casados», fue calificada por estas fuentes de «acontecimiento nuevo e ilusionante» para la Diócesis.

La palabra diácono, proveniente del griego y que se traduce como «servidor», designa el cargo que, ocupado por cristianos que han contraído matrimonio, asiste tanto al obispo como a los sacerdotes en la predicación del Evangelio y en el servicio a los más pobres.


Sacramentos: Aunque no se trata de sacerdotes, sí pueden administrar el sacramento del Bautismo y el del Matrimonio, celebrar exequias y llevar la comunión a los enfermos. En cambio, no pueden celebrar misa -aunque ayuden a dar la comunión- ni confesar a los fieles, según las mismas fuentes.

Desde hoy, el eldense Luis Manuel da Silva Tajuelo, el oriolano Francisco Juan López Albaladejo y el almoradidense Manuel Cosme García Vaíllo serán los primeros diáconos de la Diócesis de Orihuela-Alicante. La Conferencia Episcopal autorizó a esta diócesis en 2000 a instaurar la figura del diaconato permanente, y en la actualidad ya se preparan otros cinco candidatos, que serán ordenados en el futuro.


«Madurez cristiana»: De los tres que se ordenan hoy, se ha valorado según fuentes del Obispado «la madurez humana y cristiana», «el amor a la Iglesia» o su «actitud de servicio y entrega pastoral». Asimismo, las citadas fuentes destacaron de los tres varones «la capacidad de diálogo con las personas y su compromiso con los problemas del mundo».

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Información.es de Alicante, publicó:
Los primeros diáconos
El obispo de la Diócesis Orihuela-Alicante ordenó ayer en la Catedral oriolana a los primeros tres diáconos casados de la Diócesis, Luis Manuel Da Silva, Manuel Cosme y Francisco Juan López. Los tres han pasado por un periplo de siete años para su formación y tendrán que compaginar el diaconato con su trabajo civil y su familia.
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También publicó Información.es de la Vega Baja:
«Sabemos que vamos a ir abriendo camino»
D. P. Francisco Juan López, de 55 años, natural de Orihuela, casado con dos hijos habla sin poder reprimir el gesto de emoción sobre su primer destino en Callosa de Segura. «En la vicaria primera me encargaré de la pastoral de la caridad», explica a escasos metros de su familia que observa con sorpresa la expectación que ha generado la ordenación en los medios de comunicación. «Debo compaginar el diaconado, el servicio a los demás a imitación de Jesucristo con mi trabajo civil para el sustento de mi familia. Es un paso importante porque creo que a través del sacramento que acabo de recibir el trabajo que he realizado durante toda mi vida fundamentalmente en las parroquias y en el servicio a la caridad se puede llevar a cabo mejor», señala Francisco Juan y añade: «Resulta muy difícil hacer compatible todo pero yo me acuerdo estos días mucho de la Virgen María, confío en Dios y con su ayuda lo podré realizar. La familia es algo importante porque el sacramento del orden que acabo de recibir no tiene que menoscabar el del matrimonio». Y apunta: «Llevamos siete años estudiando a nivel universitario, intelectual, pastoral. Somos los primeros y se ha ido un poco demorando al no tener certeza...».
Con cuarenta años, Luis Manuel Da Silva Tajuelo es director de un grupo de empresas en Elda, está casado y tiene una hija de 15 años y un hijo de 10. Dice que el de ayer «es un paso importante en el camino de la Fe. Este es un servicio que nos ofrece la iglesia y acompañados además de nuestra familia. Qué mejor dicha que esa. Hemos intentado hacer las cosas bien. Salir muy bien preparados para poder dar respuesta a la gente en la calle», en este caso en el campo de Monóvar. «No va a ser fácil pero lo hemos preparado (en la empresa) para lo que realmente me gusta que es entregarme a los demás».
El almoradidense Manuel Cosme García Vaíllo, de 41 años, es profesor de religión desde hace 18, y ahora imparte clases en el Instituto La Encantá de Rojales. Está casado con Mari Carmen y tiene dos hijos, Andrea de 10 años y Cosme de 5.

Dice que la ordenación es una continuación de su trabajo «con los chavales». «Es un primer paso de esta Diócesis Es algo una cosa muy grande. Es una gran alegría. Sabemos que vamos a ir abriendo camino. Depende la acogida, nuestra labor, de nuestra familia. Estamos muy ilusionados. Sabemos que los problemas no nos van a faltar. Unos por parte de la familia. Tenemos hijos pequeños. Trabajo. No nos pueden comparar...».
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Información.es de la Vega Baja publicó:
     
ORDENACION  HISTORICA EN ORIHUELA
El obispo ordena a diáconos casados por primera vez en la Diócesis Luis Manuel Da Silva, Manuel Cosme y Francisco Juan López harán compatible el diaconato con su trabajo civil y su familia

Con Dios y con la familia. El obispo diocesano monseñor Rafael Palmero ordenó ayer a los primeros diáconos permanentes -casados y con hijos- de la historia de la Diócesis Orihuela-Alicante en la Catedral de Orihuela. Un «acontecimiento nuevo e ilusionante» para esta Diócesis, aunque no ajeno a otras desde que el Concilio Vaticano II decidiera recuperar esta figura.
La Catedral de El Salvador se llenó para recibir la ordenación de Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda, Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí, y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela. Los hábitos y el ritual no desmerecían de las ordenes sagradas para el sacerdocio, aunque si contrastaban en compañía de mujer e hijos en el altar mayor a la hora de realizar las fotos de rigor.
Han estado preparándose para esta ordenación durante siete años Muchos han quedado en el camino. Se ha valorado en los escogidos «la madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral, la capacidad de diálogo con las personas y su compromiso con los problemas del mundo» -y algo no menos importante- «seguir viviendo de su trabajo en la vida civil». Y es que entre los ordenados ayer hay un directivo de empresa de Elda, un profesor de Religión en un instituto de Rojales y un administrativo en Orihuela que deberán hacer compatible su trabajo «civil» con sus nuevos destinos vocacionales en el campo de Monóvar, Dolores y Callosa de Segura.
Tarea difícil. El diaconado exige a los aspirantes tres años de formación teológica y un año de pastoral y práctica de los ministerios. Además pueden ser diáconos casados si tienen 35 años, cinco años de matrimonio y el consentimiento y acompañamiento de su esposa. Deben ser «buenos cristianos, buenos padres y esposos y comprometidos en la labor pastoral de la iglesia». También pueden ejercer como diaconos los solteros mayores de 25 años y los viudos.
Diácono, se explicaba ayer, es una palabra que proviene del griego y significa «servidor». Su misión principal consiste en asistir al obispo y a los sacerdotes ayudándoles en la predicación del Evangelio y en el servicio a los más pobres. Es es un clérigo que ha recibido el primer grado del sacramento del orden. No son sacerdotes por eso, ni celebran misa (aunque ayudan a dar la comunión), ni confiesan a los fieles. Sí pueden administrar el sacramento del bautismo y del matrimonio, celebrar exequias y llevar la comunión a los enfermos.
Según el obispado, la designación de cristianos casados para el ejercicio del diaconado permanente es un orden muy antiguo en la historia de la Iglesia Católica, aunque es a partir del Concilio Vaticano II cuando esta práctica vuelve a revitalizarse en la tradición de occidente a expensas de las necesidades y decisión del obispo de cada diócesis.
La posibilidad de instauración en la Diócesis de Orihuela-Alicante del diaconado fue aprobada por la Conferencia Episcopal el 4 de marzo de 2000. Es en 2001 cuando el obispo Victorio Oliver, firma el nombramiento de José Antonio Berenguer Cerdá como director de Formación y presidente de la Comisión Diocesana. Además de los tres que fueron ordenados ayer se preparan en este momento otros cinco candidatos al diaconado permanente.
El obispo Rafael Palmero Ramos dio la bienvenida a los nuevos diáconos recordando que la iglesia ha restablecido el diaconado, «que puede ser conferido a hombres casados, constituye un enriquecimiento importante para la misión de la iglesia». De hecho el Obispado parece estar interesado en impulsar esta fórmula. Ayer en el acto de ordenación difundió cientos de trípticos en el que se informaba de los requisitos básicos para lograr ser diácono, e incluso donde se facilita el número de móvil del responsable de la comisión diocesana para el dioconado permanente.

En el aire quedan varias preguntas. Si este paso responde -también- a la falta de «manos» en la Iglesia además de a cierta convicción de renovación, y si ésta podría ser una vía para alcanzar un papel distinto de las mujeres en la Iglesia.
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El periódico Las Provincias.es, publicó:

Tres hombres casados serán hoy ordenados diáconos
             
El obispo de la Diócesis Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, ordena hoy diáconos permanentes a tres hombres casados, lo que sucede por primera vez en esta diócesis, según informaron en un comunicado fuentes del Obispado. La ordenación de tres cristianos casados se celebrará a las once de la mañana de hoy y, según el Obispado, es "un acontecimiento nuevo e ilusionante en la historia diocesana" de la provincia.

Serán nombrados diáconos permanentes, Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda; Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí; y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela. Se ha valorado de ellos "la madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral, la capacidad de diálogo con las personas y su compromiso con los problemas del mundo". 

Diácono es una palabra que proviene del griego y significa "servidor". Su misión principal consiste en asistir al obispo y a los sacerdotes ayudándoles en la predicación del Evangelio y en el servicio a los más pobres.

El diácono es un clérigo que ha recibido el primer grado del sacramento del orden, por lo que "no son sacerdotes, ni celebran misa aunque ayudan a dar la comunión, ni confiesan a los fieles". Sí pueden, por el contrario, "administrar el sacramento del Bautismo y del Matrimonio, celebrar exequias y llevar la comunión a los enfermos".

La designación de cristianos casados para el ejercicio del diaconado permanente es un orden muy antiguo en la historia de la Iglesia Católica, aunque es a partir d

el Concilio Vaticano II cuando esta práctica vuelve a revitalizarse en la tradición de occidente.


La posibilidad de instauración en la Diócesis de Orihuela-Alicante del diaconado permanente fue aprobada por la Conferencia Episcopal Española, el 4 de marzo de 2000. En 2001, el obispo Victorio Oliver firmó el nombramiento de José Antonio Berenguer Cerdá como director de Formación y Presidente de la Comisión Diocesana para la promoción del diaconado permanente.
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Ecclesia digital. Información al minuto, publicó el 24 de diciembre de 2007:
El próximo miércoles, 26 de diciembre, a las 11:00 de la mañana, el Obispo Diocesano, Monseñor Rafael Palmero, ordenará a los primeros Diáconos Permanentes de nuestra Diócesis en la Catedral de Orihuela. Esta ordenación de tres cristianos c
asados es para la historia diocesana un acontecimiento nuevo e ilusionante.
Concretamente serán nombrados diáconos permanentes, Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda, Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela. Se ha valorado de ellos la madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral, la capacidad de diálogo con las personas y su compromiso con los problemas del mundo.


Diácono es una palabra que proviene del griego y significa “servidor”. Su misión principal consiste en asistir al Obispo y a los sacerdotes ayudándoles en la predicación del Evangelio y en el servicio a los más pobres.  El diácono es un clérigo que ha recibido el primer grado del sacramento del orden. No son sacerdotes por eso, ni celebran misa (aunque ayudan a dar la comunión), ni confiesan a los fieles. Sí pueden administrar el sacramento del Bautismo y del Matrimonio, celebrar exequias y llevar la comunión a los enfermos.
La designación de cristianos casados para el ejercicio del diaconado permanente es un orden muy antiguo en la historia de la Iglesia Católica, aunque es a partir del Concilio Vaticano II cuando esta práctica vuelve a revitalizarse en la tradición de occidente. La posibilidad de instauración en la Diócesis de Orihuela-Alicante del diaconado permanente fue  aprobada por la Conferencia Episcopal Española, el 4 de marzo de 2000. Es en 2001 cuando el Obispo, Mons. Victorio Oliver, firma el nombramiento de D. José Antonio Berenguer Cerdá como Director de Formación y Presidente de la Comisión Diocesana para la promoción del diaconado permanente en Orihuela-Alicante.
Además de los tres que van a ser ordenados el próximo miércoles en nuestra Diócesis se preparan en este momento otros cinco candidatos al diaconado permanente. (Nota de prensa de la diócesis).

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El Semanario Alfa y Omega en su número 574 del 3/1/2008 publicó:

Monseñor Rafael Palmero, obispo de Orihuela-Alicante, ha ordenado a los primeros diáconos permanentes de la diócesis. Se trata de tres cristianos casados, don Luis Manuel da Silva, de Elda, don Manuel Cosme García, de Almoradí, y don Francisco Juan López, de Orihuela.
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En Canariasahora.es, se publicó:


Primeros casados ordenados como diáconos
Los diáconos Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí (i); Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda (c); y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela, los tres primeros hombres casados que este miércoles han sido ordenados como diáconos permanentes de la Diócesis Orihuela-Alicante en un acto celebrado hoy en la catedral de Orihuela. (MORELL / EFE)
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Yahoo España. Noticias, publicó:

Cien sacerdotes asisten a la primera ordenación de casados como diáconos 

 EFE - miércoles, 26 de diciembre, 18.07

Orihuela (Alicante), 26 dic (EFE).- Un centenar de sacerdotes de la han dado hoy la bienvenida a los tres primeros hombres casados que han sido ordenados como diáconos permanentes en este obispado.

Diócesis Orihuela-Alicante

Según un portavoz de la Diócesis, el acto, que se ha realizado en la catedral de Orihuela, ha sido presidido por el obispo, Rafael Palmero, quien ha llamado a las tres personas al orden de los diáconos, quienes a su vez han respondido con la promesa de obediencia a la iglesia.
Los diáconos nombrados han sido Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda; Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí, y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela, de quienes se ha valorado, entre otras cosas, "su madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral",.
La Diócesis alicantina considera que la ordenación de estos tres cristianos casados es "muy importante" porque es la primera vez que en Alicante desarrolla el diaconado permanente por parte de casados, tal y como fue aprobado por la Conferencia Episcopal en marzo de 2000.
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En Terra, actualidad, provincias, Alicante, publicó, igual que Las Provincias, edición impresa y en Internet:

Cien sacerdotes respaldan la ordenación de los tres primeros diáconos que están casados en Orihuela.

Es la primera vez en la diócesis que los ordenados contrajeron matrimonio con anterioridad

La catedral de El Salvador de Orihuela ha albergado un acto histórico para la historia de la Iglesia. Un centenar de sacerdotes de la Diócesis ha dado con su presencia la bienvenida a los tres primeros hombres casados que han sido ordenados como diáconos permanentes en este obispado. Según un portavoz de la Diócesis, el acto, que se ha realizado en la catedral de Orihuela, lo ha presidido el obispo, Monseñor Rafael Palmero, quien llama a las tres personas al orden de los diáconos, ellos, a su vez responden con la promesa de obediencia a la iglesia.


Los diáconos nombrados son Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda; Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí, y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela, de quienes se ha valorado, entre otras cosas, 'su madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral'. La Diócesis alicantina considera que la ordenación de estos tres cristianos casados es 'muy importante' porque es la primera vez que en Alicante desarrolla el diaconado permanente por parte de casados, tal y como fue aprobado por la Conferencia Episcopal Española en marzo de 2000. Este paso es muy significativo.
Supone un avance de la Iglesia Católica, en este caso de la diócesis de Orihuela, muy importante para la apertura de la institución desde el último concilio.

Con las reformas introducidas a mediados de la década de los sesenta del siglo pasado se dejó la puerta abierta a que con el tiempo el sacramento del matrimonio no fuera impedimento para ejercer labores pastorales. El hecho de que un grupo de alumnos de los nuevos diáconos junto con cien sacerdotes de la diócesis estuvieran en el acto es un claro apoyo a la medida.
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 La Verdad.es publicó:
El Obispado ordena a los primeros tres diáconos casados de la historia diocesana en la provincia

Monseñor Palmero impuso las manos a un almoradidense, un oriolano y un eldense en una emotiva ceremonia en El Salvador Cientos de personas abarrotaron el templo para presenciar el acto

El obispo de la Diócesis Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, colgó ayer el cartel de no hay billetes a las puertas de la oriolana catedral de El Salvador. La razón no era cualquier cosa, puesto que el prelado ordenó por primera vez en la historia diocesana de la provincia a tres diáconos casados, que ejercerán su ministerio con carácter permanente. De ellos, dos con origen en la comarca de la Vega Baja y el tercero en el departamento del Vinalopó.
RITUAL. Un sacerdote impone la indumentaria al nuevo diácono, al oriolano Francisco Juan López Albaladejo, momentos antes de ser ordenado por el obispo. / ALBERTO ARAGÓN
Se trata del oriolano Francisco Juan López Albaladejo, el almoradidense Manuel Cosme García Vaíllo y el eldense Luis Manuel Da Silva Tajuelo, quienes estuvieron arropados por centenares de personas que abarrotaron el templo catedralicio.

Tal y como explicó el propio obispo, la designación de cristianos casados para el ejercicio del diaconado permanente es un orden muy antiguo en la historia de la Iglesia Católica, aunque fue a partir del Concilio Vaticano II cuando el modelo de designación vuelve a revitalizarse. La posibilidad de instauración en la Diócesis de Orihuela-Alicante del diaconado permanente fue aprobada por la Conferencia Episcopal Española en marzo del 2000. Pero fue en el 2001 cuando el entonces obispo, Victorio Oliver, firma el nombramiento de José Antonio Berenguer Cerdá como Director de Formación y Presidente de la Comisión Diocesana para la promoción del diaconado permanente en Orihuela-Alicante.
Dicho y hecho... siete años después, tras un concienzudo proceso de formación de los candidatos, monseñor Palmero les impuso las manos y les abrió las puertas de la Diócesis, tras recordar que ayer era el Día de San Esteban, el primero de los diáconos, cargo que constituye como aclaró el obispo el primero de los grados del Orden eclesiástico, y a los tres les envió de forma inmediata «a trabajar en la viña del Señor como ya dijo en su día el Papa Benedicto XVI» cuando fue designado para el cargo por la Curia.
Para los nuevos diáconos permanentes de la diócesis pidió Rafael Palmero que «todos les reverencien como a Dios, al obispo o a los presbíteros porque sin ellos no se puede hablar de Iglesia»; y sostuvo monseñor que los nuevos miembros de la Iglesia «tienen la obligación de estar entre los enfermos, los inmigrados, los marginados y, sobre todo, los pobres; y tienen el mandato de llegar a las fronteras de la evangelización». Además, su misión principal, según la norma eclesiástica, consiste en asistir al obispo y a los sacerdotes ayudándoles en la predicación y en la ayuda a los desfavorecidos. El diácono es un clérigo que ha recibido el primer grado del sacramento del orden. No son sacerdotes, por eso ni celebran misa -aunque ayudan a dar la comunión-, ni confiesan a los fieles, a lo que por cierto invitó el prelado nada más hacerse cargo del micrófono del templo oriolano. Sí pueden los diáconos administrar el sacramento del Bautismo y del Matrimonio, celebrar exequias y llevar la comunión a los enfermos. Las voces del Coro de Bonanza dieron de forma intermitente el carácter festivo al acontecimiento litúrgico en el que Palmero impuso las manos y realizó la plegaria de Oración, los momentos «más importantes de la ceremonia de ordenación de diáconos», según el prelado.
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La Verdad.es en la sección de Orihuela,  publicó además:
Palmero cree que el «Diaconado de casados enriquece la Iglesia»

El máximo representante de Dios en la Diócesis de la provincia, Rafael Palmero, sostuvo enérgicamente que «designar como diáconos permanentes a hombres con familia contribuye al enriquecimiento de la Iglesia» y a la exaltación de sus valores. En este sentido, alargó su reflexión para realizar un matiz que no pasó inadvertido entre los presentes y que no lo explicitó el obispo como algo baladí, sino todo lo contrario, al asegurar que el nombramiento de nuevos diáconos «no supone que la Iglesia tenga falta de vocaciones sacerdotales, aunque tampoco es la figura del diácono la de un superlaico», adjetivo que casi sonó a chascarrillo y que dio una nota tibia de humor y cercanía a la solemne ceremonia eclesiástica.

Antes, hasta medio centenar de sacerdotes y aspirantes acompañaron al obispo Rafael Palmero hasta el corazón mismo de la catedral de El Salvador junto a los todavía candidatos a diáconos entre voces espirituosas procedentes del Coro Voces de Bonanza que llenaban el entorno catedralicio, que ayer era cálido y pequeño merced a los cientos de personas entre fieles y familiares de los protagonistas que pusieron la bancada de bote en bote, merced al calor y la multitudinaria compañía que desprendían.

Desde el principio se vivió la novedosa ceremonia de ordenación de diáconos como una fiesta salpicada en todo momento por los 'top' corales a tenor del acompañamiento realizado por la casi totalidad de los congregados, si bien es cierto, el responsable de comunicación del Obispado, Eloy Martín, repartió un magnífico programa donde se detallaba las claves de la Liturgia y los contenidos de pe a pa, lo que fue de gran ayuda tanto para los doctores que reunió la Iglesia como para los novatos presentes, gesto muy en la línea didáctica que practica el cura periodista entre los compañeros de la Canalla y los asistentes a los ritos eclesiásticos, con afán siempre de ayudar a comprender los entresijos del asunto.

A partir de ahí se lanzó el prelado que realizó una homilía constructiva, educativa y salpicada de detalles históricos que contribuyeron a hacerse entender por los presentes y con un discurso a ras de ciudadano en el que los fieles interiorizaron lo que debe ser el espíritu y la labor de un diácono.

Todo esto ocurría en El Salvador al tiempo que no paraba de entrar gente al templo. Tuvo tiempo el obispo para ejercer su ministerio tanto en lo litúrgico como en lo formativo, y dio muestras claras de su dominio de la escena y los ritmos cuando llegado al momento de realizar el rito de la ordenación se saltó el párrafo referente al abrazo del celibato, sabiendo el prelado como sabía que los tres aspirantes son hombres casados que pasean estandarte de fe y matrimonio allá por donde van. Al final, como el cargo lleva implícita la obligación, Palmero les mandó hacer lo que saben, ayudar a los demás, sobre todo a los pobres, sin esperar nada a cambio más allá de las recompensas propias que establece la Iglesia y, en última instancia Dios.
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Diaconos casados en Orihuela


Un centenar de sacerdotes de la Diócesis Orihuela-Alicante han dado hoy la bienvenida a los tres primeros hombres casados que han sido ordenados como diáconos permanentes en este obispado. En la imagen un momento de la ordenación de los diáconos. EFE/MORELL

Un centenar de sacerdotes de la Diócesis Orihuela-Alicante han dado hoy la bienvenida a los tres primeros hombres casados que han sido ordenados como diáconos permanentes en este obispado.
EFE Según un portavoz de la Diócesis, el acto, que se ha realizado en la catedral de Orihuela, ha sido presidido por el obispo, Rafael Palmero, quien ha llamado a las tres personas al orden de los diáconos, quienes a su vez han respondido con la promesa de obediencia a la iglesia.
Los diáconos nombrados han sido Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda; Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí, y Francisco Juan López Albaladejo, natural de Orihuela, de quienes se ha valorado, entre otras cosas, "su madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral".

La Diócesis alicantina considera que la ordenación de estos tres cristianos casados es "muy importante" porque es la primera vez que en Alicante desarrolla el diaconado permanente por parte de casados, tal y como fue aprobado por la Conferencia Episcopal en marzo de 2000.
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Orihueladigital.es publicó:
Ordenan por primera vez en la historia de la Diócesis Orihuela-Alicante a tres diáconos casados
Orihuela (Alicante) - 26 diciembre 2007 - Orihuela Digital - Hoy miércoles, 26 de diciembre, a las 11:00 horas, el Obispo de Orihuela-Alicante, Rafael Palmero Ramos, ordenará a los primeros Diáconos Permanentes de nuestra Diócesis en la Catedral de Orihuela. Según explicó el Obispado de Orihuela-Alicante "esta ordenación de tres cristianos casados es para la historia diocesana un acontecimiento nuevo e ilusionante".
Concretamente serán nombrados diáconos permanentes, Luis Manuel Da Silva Tajuelo, de Elda; Manuel Cosme García Vaíllo, de Almoradí; y Francisc o Juan López Albaladejo, natural de Orihuela.
Se ha valorado de ellos la madurez humana y cristiana, el amor a la Iglesia, la actitud de servicio y entrega pastoral, la capacidad de diálogo con las personas.

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