Bienvenido a nuestro espacio en la Red

¡ Sé bienvenido a nuestro humilde espacio !.

Blog pensado para ir publicando alguna información interesante o noticias que sucedan en nuestra diócesis de Orihuela-Alicante y que tenga que ver con este reciente Ordo Diaconal que existe desde el 26 de Diciembre de 2007.

Aquí puedes hacernos tus comentarios o si necesitas localizarnos, o sencillamente necesitas algún documento o material relacionado con nosotros, lo puedes hacer en mcosmegv@gmail.com.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Encuentro de los diáconos con el nuevo Obispo

Momento del encuentro con Mons. Jesús Murgui Soriano
El pasado sábado día 10 de noviembre, nos reunimos por primera vez el ordo de los diáconos permanentes de nuestra diócesis con nuestro recién llegado Obispo D. Jesús Murgui Soriano.

Fue iniciativa de nuestro nuevo pastor el convocarnos para conocernos personalmente  y junto a nuestro, también nuevo, subdirector de formación permanente el Rvdo. D. Manuel Martínez Miravete, acudimos al CEU San Pablo de Alicante, lugar del encuentro.

D. Jesús, como si nos conociera de toda la vida, nos fue presentando la realidad del diaconado en la Iglesia, así como nos habló de nuestros hermanos en el orden, en su diócesis anterior, Mallorca. No hay que olvidar que nuestro obispo forma parte de la Comisión para el diaconado permanente de la Conferencia Episcopal Española.

Por la izquierda: Ralph, Joaquín, M.Cosme, D. Jesús, Paco, Francis y D. Manuel.
Pero..., lo que más nos agradó fue su calurosa acogida, ya que sentimos su cercanía. ¡Qué razón tienen las personas que nos han felicitado por el nombramiento de D. Jesús como pastor de nuestra diócesis!. Sus opiniones se quedaron cortas ante la grandeza humana, espiritual y afectiva que posee y que pocas personas serían capaces de alcanzar.
Estimado D. Jesús, recordando las promesas del día de nuestra ordenación, en concreto aquella en la que nuestro inolvidable D. Rafael nos preguntó si prometíamos obediencia y respeto a él y a sus sucesores, hoy reiteramos aquella respuesta y nuevamente nos ponemos a su disposición plenamente, sabiendo que es la disposición al Señor y a su mandato de ir a todo el mundo llevando y predicando la Buena Noticia a todos los hombres, mujeres y niños, hasta que el Señor quiera.

Manuel Cosme.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Ordenan a dos nuevos diáconos permanentes en Albacete


El pasado sábado 3 de noviembre, el Obispo de Albacete, monseñor Ciriaco Benavente, ordenó diáconos permanentes en la parroquia de El Salvador de La Roda a Carlos del Olmo Jiménez y a Pedro Jesús García Cortijo. 

Damos desde aquí nuestro humilde abrazo de bienvenida al Ordo Diaconal dentro de la Gran Familia de la Santa Iglesia de Jesucristo.
Puedes leer la noticia completa pulsando sobre aquí

viernes, 2 de noviembre de 2012

¡Última ordenación diaconal de Mons.Palmero!

  Gracias al Rvdo. D. Enrique Jordá Pascual, he recibido unas fotos de la ordenación diaconal del pasado 22 de Septiembre del presente año, donde el Obispo, entonces administrador de la Orihuela-Alicante Monseñor Rafael Palmero Ramos ordenó a 6 diáconos para nuestra diócesis. http://www.revistaecclesia.com/wp-content/uploads/2012/09/diaconos-1.jpg

Cuatro de ellos han emprendido el camino previo al sacerdocio, trabajando en distintas parroquias de la diócesis. Ellos son los que aparecen sentados a la puerta de nuestro Seminario San Miguel de Orihuela: Miguel Cano, Marcos Antonio, Jesús Manuel y Abelino Abad.

Además, de estos cuatro jóvens, otros dos, junto a ellos han sido ordenados, también diáconos pero en estado permanente, son hombres casados y se han ofrecido para ponerse también desde ese momento al servicio de la Iglesia, concretamente en esta porción de la viña del Señor, llamada Orihuela-Alicante.
 
Ha sido la última ordenación de D. Rafael, junto a él, participó un nutrido número del presbiterio diocesano y casi todos los diáconos permanentes, para darle el abrazo de bienvenida y acogerlos en el ordo diaconal.

Fue muy emotiva, como suelen ser todas las ordenaciones. Señalar que si el templo es grande y hermoso, podríamos afirmar que se quedó pequeño y no fue capaz de albergar a tanta gente como se dió cita en tal acontecimiento jubilar para la Iglesia, concretamente en nuestra diócesis.

Debemos indicar, respecto al ordo diaconal, que el curso pasado no se ordenó a ningún diácono permanentes, por lo que en estos momentos, junto a los dos nuevos, empezando desde el sur de la diócesis, somos ya:
  • Paco López y Alfonso en Orihuela.
  • Manuel Cosme de Almoradí.
  • Francis y Joaquín de Elche.
  • Ralph de Alicante.
  • Federico de Villena. 
Debemos seguir pidiendo y dando gracias al Señor porque el número de los llamados al servicio de la mesa y de los hermanos va aumentando, sin prisas, pero sin pausa. Poco a poco, pero se va acrecentando.

Podemos afirmar que para el presente curso siguen habiendo varias personas interesadas en ingresar en la formación y en el discernimiento para ver si el Señor les llama a este ministerio diaconal.

Las dos citas más próximas en nuestra agenda son: Para el próximo sábado, D.M., por la mañana, a las 10,00 horas nos daremos cita en la Casa Sacerdotal los tres grupos de este ordo: los formadores, los diáconos y los aspirantes. Será motivo de mucha alegría, porque nuevamente tendremos ocasión de saludarnos, pero muy especialmente el de encontrarnos con nuestro director, el estimado y querido, con el prelado de su santidad Monseñor Don José Antonio Berenguer Cerda.



Y la segunda fecha, si no cambián los planes, será el siguiente sábado día 10 de Noviembre, tendremos un "primer" encuentro con el nuevo Obispo de nuestra diócesis, Mons. Jesús Murgui Soriano; siendo un motivo también muy grande de dar gracias al Señor, porque nuestro nuevo Pastor ha querido reunirse con estos humildes servidores, al inicio de su ministerio episcopal en estas tierras alicantinas. 

Que el Señor le bendiga a él y a todos nosotros.

Manuel Cosme García Vaíllo

lunes, 10 de septiembre de 2012

Ordenación diaconal

¿Quién como Dios?

Con una foto de la imagen del Arcángel San Miguel de la capilla del Seminario Diocesano de Orihuela, y con las palabras de su grito al demonio: "¿Quién como Dios?" se presenta la invitación a la próxima ordenación de diáconos de nuestra diócesis de Orihuela-Alicante.

La celebración tendrá lugar en la Parroquia de Santiago Apóstol de Albatera y será, D.M., el sábado 22 de septiembre de 2012 a las 11 horas.

Al abrir esta sencilla, pero elegante invitación, encontramos unas palabras del que ha sido hasta ahora nuestro obispo D. Rafael Palmero Ramos, y ahora administrador diocesano; en la parte de la izquierda de la tarjeta, se reproducen su invitación que dice: 

           "Os invitamos a todos a participar de nuestra alegría, que lo es de toda la diócesis, en la ordenación de estos hermano diáconos"

Y en la parte de la derecha figura el nombre de los que van a ser ordenados diácono (los seminaristas): 
  • Miguel Cano Crespo
  • Marcos Antonio Giménez Cano.
  • Abelino Abad Mora Meza.
  • Jose Manuel Poveda Ruvira.
 Y para el diaconado permanente:

  •  Federico García-Galbis Esquembre.
  • Alfoso Sabater Albertus.
Después de 2 de Octubre del 2010, que fue la ordenación de Ralph, no ha sido ordenado ningún diácono permanente en nuestra diócesis, sin embargo este curso, serán ordenados estos dos hermanos casados, Federico de Villena (izquierda) y Alfonso de Orihuela (derecha), cuyas fotos acompañan este escrito.

A todos ellos les damos la enhorabuena e intentaremos acompañarlos en este día de fiesta para la diócesis y de una manera especial para el ordo de estos hombres que en estado permanente, la Iglesia va acogiendo para el servicio pastoral que se le encomiende y poder seguir anunciando como S.Miguel ante el mundo: "Quis sicut Deus?".

lunes, 27 de agosto de 2012

Un juez ordenado diácono permanente


Como otras veces hemos hecho mención que han ordenado diáconos a hombres casados de diferentes profesiones: agentes de seguros, policías, trabajadores sociales, periodistas, etc., ayer día 26 de Agosto se dio un paso más, en la Concepción, de Chile.

En una solemne eucaristía fue ordenado el juez del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal Reynaldo Oliva Lagos, pasando a ser el primer diácono permanente célibe; es un hecho sin precedente en la Iglesia Católica de su país, y yo me atrevería a afirmar que en todo el orbe católico: juez, diácono permanente y célibe. Para ser aceptado y consagrado como Diácono Permanente, el juez debió realizar un período de formación humana, espiritual, doctrinal y pastoral.

La ceremonia fue oficiada por el Arzobispo de Concepción, monseñor Fernando Chomali, que presidió la Eucaristía y ordenó al nuevo diácono, ceremonia que contó con la presencia de numerosos sacerdotes y gran parte del cuerpo de diáconos de la Iglesia de Concepción,  que trabajan pastoralmente en las distintas parroquias y servicios eclesiales.

El juez Oliva Lagos se ha convertido en el primer diácono permanente célibe. Para ser aceptado y consagrado como Diácono Permanente, el juez debió realizar un período de formación  humana, espiritual, doctrinal y pastoral.

Esto fue logrado con el apoyo de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, a través de su Instituto de Teología, lo que implicó un plan de estudio con clases los fines de semana. Asimismo, el magistrado, quien pertenece como laico a la parroquia El Sagrario, recibió, el año pasado, el ministerio del Acolitado, etapa previa para ser aceptado en el orden del Diaconado Permanente.

Por su parte, el nuevo diácono Reynaldo Oliva expresó sus sentimientos, diciendo: “Humildemente agradezco a Dios, en este día de mi ordenación diaconal, día en que me consagro enteramente a Dios para el servicio de la Iglesia de Concepción, en perfecta obediencia al Obispo, hoy, en la persona de monseñor Chomali y en estrecha colaboración con los presbíteros,  con el servicio de la palabra, de la liturgia y la caridad. Agradezco a mi familia, a mi madre aquí presente,  a mi padre que ya ha partido ante Dios, por haberme dado la vida y la semilla de la fe en el Bautismo. A mis hermanas con quien he compartido el crecimiento de la fe. En mi familia aprendí a conocer a Dios y a darme en la oración y en la Santa Misa, lo que fue refrendado en el colegio; recordó al grupo de guías y scouts, a la escuela del diaconado, al Instituto de teología, la comunidad de Patagual, parroquia Cristo Rey de Bellavista, comunidad de Punta de Parra, parroquia Todos los Santos, parroquia Cristo Salvador y parroquia El Sagrario donde se ha formado desde niño. A los sacerdotes, a los diáconos”.

Queremos desde aquí, darle la enhorabuena por su ordenación y lo felicitamos por su elección para servir a la Iglesia de nuestro Señor en aquella parcela que le sea asignada.

¡Bienvenido al nuestro ordo diaconal!

miércoles, 22 de agosto de 2012

¡ Habemus novo Episcopo !

Siempre se ha dicho que una imagen vale más que mil palabras, y si es un video mejor aún. Aquí tenemos el video donde nuestro obispo D. Rafael, que cesa, se despide y al mismo tiempo da la Bienvenida al nuevo obispo D. Jesús Murgui, que entrará en nuestra diócesis el día 29 de Septiembre del 2012.
Gracias D. Rafael por sus años ofrecidos a esta parcela y a los que aquí vivimos en la viña del Señor de Orihuela-Alicante.
Que el Señor le bendiga.

domingo, 5 de agosto de 2012

El diácono es servidor de la Palabra en una Iglesia de Comunión


         La Iglesia, obra de la Trinidad, es comunión real entre todos los que la componen, pero además esa comunión es reflejo de la familia divina, es la Trinidad la que realiza la comunión que vive la Iglesia. La Iglesia es sacramento de comunión de los hombres con Dios y entre sí.
El Evangeliario es llevado por el diácono que luego Proclamará la Palabra

         La eclesiología de comunión se ha convertido en el verdadero y propio corazón de la doctrina sobre la Iglesia del Vaticano II. Una buena síntesis de esto la encontramos en el siguiente texto:

«Su espectro parte de la unidad en la fe, la esperanza y el amor cristianos, sellados sacramentalmente por el bautismo, que crea la situación básica de la comunión; se refuerza por la participación en la eucaristía, que está esencialmente orientada a la “unitas ecclesiae” y se rehace por el sacramento de la conversión que reconcilia con Dios y con la Iglesia; se traduce concretamente en la “colecta” de bienes y en la comunión de lo que se tiene y de lo que se es: esta comunión está presidida, visiblemente fundada y eventualmente defendida por los obispos cuyo centro es el obispo de Roma; está llamada la comunión eclesial a ser fermento de reconciliación y de paz en la humanidad; es una garantía de la asamblea consumada en la patria»[1].

         Un ejemplo de la vivencia de la comunión eclesial en la comunidad primitiva nos lo ofrece el primer sumario de la Hechos de los Apóstoles. Los que habían sido bautizados «acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles, a la comunión, a la fracción del pan y a las oraciones»[2].
  
En la Iglesia comunión, el diácono sirve la unidad

          La comunidad eclesial se sabe engendrada por la Palabra; de aquí resulta esencial su sintonía con la Palabra.

        La vida de la Iglesia primitiva demuestra que la unión de los cristianos, se realiza por la fe suscitada por la predicación de los apóstoles, alimentada por la Palabra y la Eucaristía y sostenida por la oración.

        El diácono que por el sacramento del Orden tiene como misión el anuncio, la proclamación y la predicación de la Palabra de Dios, está poniendo los pilares fundamentales para hacer realidad la unidad de los cristianos en la Iglesia, ya que la fe es la respuesta del hombre  a la Palabra salvífica de Dios.
Ambón de Iglesia de Dolores en Navidad

       La comunión eclesial que se inicia por la aceptación de la Palabra de Dios mediante la fe, que se visibiliza en el signo sacramental del bautismo, alcanza su perfección en la eucaristía.
En la liturgia el diácono ora y predica la Palabra

        Una palabra bien programada, acogida y meditada es fuente inagotable de oración viva para todo cristiano. Es Dios quien nos habla en la Palabra proclamada por el diácono.

       Es necesario que el diácono anuncie la Palabra de Dios. San Pablo plantea la cuestión del anuncio y de la escucha en oración de la Palabra, «¿Cómo invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Cómo creerán en aquel a quien no han oído? ¿Cómo oirán sin que se les predique? Y ¿Cómo predicarán si no son enviados?»[3].

En la comunidad enseña, catequiza y ejerce la caridad con la Palabra

        El diácono es servidor de Cristo,  pues la Iglesia recibió de Cristo su misión de predicar y traslada este cometido a cada uno de los predicadores. Los propios discípulos predicaron lo que vieron y oyeron. Lo que ellos hicieron es lo que ha de hacer la Iglesia, «Porque yo no he hablado por mí mismo; el Padre, que me ha enviado, es quien me mandó lo que he de decir y proclamar. Así pues, lo que yo digo, lo digo según me lo ha ordenado el Padre»[4].

       La catequesis no es algo propio y personal que le pertenezca en exclusiva al diácono. Pertenece a la Iglesia. Ella es la que tiene la misión de evangelizar y ella es la que ha confiado al diácono, entre otros, el cuidado de una parte de personas para que le ofrezca buenos alimentos y le guíe por los buenos caminos al encuentro del Señor.

     En la acción catequética Dios se va revelando progresivamente a su pueblo con amor de Padre y le conduce hacia Él con mano poderosa.

Diácono Paco López proclamando la Palabra
       El diácono está llamado a catequizar, en la familia, en los grupos de la parroquia, en los ámbitos donde ejerce su profesión, presentando a los demás la Palabra de Dios encarnada en el Verbo. Presenta a Otro que da sentido a su vida e invita a que su interlocutor también pueda entrar en contacto y amistad con Él. El diácono no sólo da testimonio de que él reconoce al Señor y lo ama; sino que ejerce de mediación para que por su boca el Señor salga al encuentro de los demás. El diácono escucha la Palabra para transmitirla después, en razón de su ministerio ordenado, a todas aquellas personas y grupos que la Iglesia le tiene confiados.

      La Palabra, es Dios mismo quien la siembra en el corazón de los hombres. En el corazón de la actividad catequética se encuentra la Palabra de Dios que se escucha por el oído y debe calar en lo más hondo del corazón. Es el mismo Cristo el que se nos comunica en ella y  nos lleva al Padre, en el Espíritu Santo.

      Toda acción pastoral lo es sólo en la medida en la que está sostenida y alimentada por la Palabra.

     En la primitiva comunidad cristiana, como fruto de la aceptación de la Palabra anunciada y aceptada por la fe, compartían los bienes materiales con los necesitados: «todos los creyentes vivían unidos y tenían todo en común; vendían sus posesiones y sus bienes y repartían el precio entre todos, según la necesidad de cada uno» (Hch 2, 44).

Francisco J. López Albaladejo
Diácono permanente


[1] R. Blázquez, La Iglesia del Vaticano II. Salamanca 1988, 58-59.
[2] Hechos de los Apóstoles  2, 42.
[3] Cf. Rm 10, 14-15.
[4] Jn 12,49.

sábado, 4 de agosto de 2012

¡ Gracias, Señor, por D. Rafael !


       Todos y cada uno de nosotros, como diáconos permanentes de la diócesis de Orihuela-Alicante, un día recibimos de manos de D. Rafael la ordenación diaconal. Él fue el primer obispo de nuestra diócesis que ordenó para el ministerio diaconal, con carácter de permanente, a seis hombres casados para servir en los distintos ámbitos de la pastoral diocesana.

     Tal y como figura en la tradición de la Iglesia, los diáconos siempre han estado junto a su obispo. De manera similar en nuestra misión como servidores y ministros ordenados, nos hemos sentido muy cerca de nuestro obispo. D. Rafael ha significado mucho para este grupo de hombres que se han sentido llamados a trabajar en la mies del Señor.

     A lo largo de estos años, más de cinco para los tres primeros que recibimos la ordenación sacramental, todos nos hemos sentido confortados y guiados con sus palabras, con su vida de entrega y con la imagen que nos ha transmitido de Jesucristo Siervo del Padre, Diácono del Padre; lo que nos ha hecho vivir más plenamente nuestra vida y nuestra vocación a la llamada de Dios, desde nuestra condición de esposos y padres.

     Don Rafael, nuestro obispo, ha sido más que nuestro pastor, ha sabido meternos en su corazón, y ha conseguido acercar nuestras vidas más a Jesús, a su Padre y al Espíritu Santo.

     Los diáconos ordenados, los que serán ordenados próximamente si Dios quiere, y los aspirantes que se están formado, tenemos que agradecerle sinceramente que haya dado cauce a esta vocación que no la hemos buscado, hemos sido llamados y enviados para vivirla de modo permanente. Con nuestra mayor humildad, los que hemos sido llamados por el Señor para «servir» como miembros de su Iglesia, de una manera especial, queremos agradecer al Señor los años en los que nos hemos visto enriquecidos con el cuidado amoroso y cercano de nuestro Pastor y Padre.

  Gracias, don Rafael, por el Diaconado Permanente en nuestra diócesis. Ha sido valiente porque ha confiado en lo que la Iglesia de Jesucristo ha creído conveniente para la gloria de Dios y la salvación de los hombres. Sabemos que, como padre y pastor, ha seguido con gran interés el caminar de cada uno de nosotros, durante estos años, por las sendas de nuestro servicio diaconal.

    No encontramos palabras para expresarle nuestra gratitud, por ello diremos, simplemente, de parte  nuestra y de nuestras esposas e hijos, un abrazo, don Rafael, y que el Señor le bendiga y guarde siempre en el servicio a la Iglesia.

Los diáconos permanentes y aspirantes
de la Diócesis de Orihuela- Alicante

miércoles, 1 de agosto de 2012

Felicidades por Don Jesús

Con toda la humildad del mundo, queremos poner un correo de los muchos recibidos por el nombramiento de D. Jesús Murgui Soriano como obispo de nuestra diócesis. Estas palabras recibidas son de nuestra diócesis hermana de Mallorca, su texto dice así:
D. Jesús y a su lado diácono J.Gamudí

Enhorabuena por vuestro "humilde espacio" este magnífico Blog que hace posible que el diaconado permanente sea conocido cada vez más.

Felicitaros por el nombramiento de vuestro Obispo D. Jesús Murgui Soriano, de entrada ya es mucho el tener un obispo pro diaconado permanente, y que quiere a los diáconos y los valora. Como hermano en el ministerio diaconal os animo a prestarle vuestra ayuda, es un buen hombre y además un buen obispo, seguro que os alegraréis de servirle.

Un abrazo fraternal

Juan Gamundí
Diácono permanente de la diócesis de Mallorca
Parroquia Alcúdia i Port d'alcúdia

Gracias a ti Juan y a todos los que nos acompañáis en estos momentos de incertidumbre, nervios e ilusión ante la llegada de un nuevo pastor.

Que el Señor os bendiga. 

Manuel Cosme.

sábado, 28 de julio de 2012

Primeras palabras ante el nombramiento de nuevo Obispo

Estas son las primeras letras de Monseñor Jesús Murgui Soriano y las de Monseñor Rafael Palmero Ramos de despedida, ante la noticia del nombramiento del primero para ser obispo de la diócesis de Orihuela-Alicante:


Carta de salutación a la Diócesis de Orihuela - Alicante del obispo electo, Jesús Murgui Soriano
Palma de Mallorca, 27 de julio de 2012

Estimados hijos de la Iglesia de Orihuela-Alicante:
Desde la querida Mallorca, la Providencia de Dios me lleva hasta vosotros. A través de la voluntad del Santo Padre Benedicto XVI, pone ante mí el honroso deber de ir a serviros como sucesor de los Apóstoles, como obispo de la Iglesia de Dios que peregrina en esa tierra entrañable.

Me siento enviado a una comunidad diocesana llamada a evangelizar  a una muy grande y variada realidad humana, y que atesora una riquísima historia, con magníficos pastores, algunos de los cuales he podido conocer y apreciar personalmente, como es el caso del que actualmente os guía y preside admirablemente, Mons. Rafael Palmero Ramos; a ellos deseo suceder en su entrega y ejemplaridad. Para ello me esforzaré, ayudado por mis hermanos sacerdotes, por las personas consagradas y los fieles cristianos laicos, por todos aquellos en quienes se hace realidad la obra de Dios, por la acción del Espíritu santo, que Jesucristo sigue enviando a su Iglesia. Confío en vuestra caridad. Rezad por mí, como yo hago, ya, por vosotros.

En un día como este, marcado por el deseo de presentarme y de ofrecerme a todos, quiero dejar constancia de mi gratitud al Santo Padre Benedicto XVI, porque siento como un acto de gran confianza por su parte el que me haya encargado el cuidado de una diócesis tan singular, y quiero dejar patente, también, mi deseo, nada retórico, de ir a serviros con toda mi alma, apoyado en la gracia de Dios, que nos unirá, para que juntos, conducidos por Él, estemos a la altura de unos tiempos no fáciles, en medio de una sociedad con tantas necesidades, en la que todos los miembros del Pueblo de Dios estamos llamados a una Nueva Evangelización.

Que la poderosa intercesión de Santa María Virgen, Madre de Dios, y el patronazgo del Pare Sant Vicent Ferrer, nos sostengan siempre.

Con mi bendición, recibid mis mejores deseos para este verano, que nos llevará, en el inicio del próximo curso pastoral, al Año de la Fe, tiempo de gracia que, en plena comunión con el Sucesor de Pedro y toda la Iglesia, estamos llamados a vivir con gozosa intensidad.

+ Jesús Murgui Soriano - Obispo electo de Orihuela-Alicante

Despedida o saludo de bienvenida de Mons. Rafael Palmero Ramos
Alicante, 27 de julio de 2012.

1. Escribí, hoy hace un año, al Santo Padre, diciéndole que en ese 27 de julio de 2011 cumplía 75 años, la edad señalada por el vigente Código de Derecho Canónico (c. 401,1) para la jubilación.

Hoy, 27 de julio de 2012, nuestro querido Papa Benedicto XVI, el que me nombró obispo de Orihuela-Alicante hace seis años y medio, se ha dignado aceptarla.

Recuerdo muy bien que en la mencionada carta del año pasado expresé un doble sentimiento, que reitero de nuevo:

- De gratitud al Señor por la vocación al sacerdocio y la dedicación al ministerio episcopal durante 24 años, en Toledo, en Palencia y aquí, con vosotros, queridos diocesanos.

- De ofrecimiento para seguir prestando idéntico servicio, aunque de otra manera, desde la retaguardia orante.  Teniendo siempre a la vista la actitud del Verbo en la Encarnación, que "no vino a ser servido sino a servir" (Mt 20, 28), y la sentencia de Orígenes: "Quien es llamado al episcopado, no es llamado al poder, sino al servicio de toda la Iglesia" (I Cant. Comen. 1,3), quiero seguir trabajando con la oración, con la predicación y con todas las obras de caridad.

2. No es éste, pienso yo, el momento de hacer balance alguno de lo que hemos vivido y hemos logrado juntos. El Señor lo sabe y lo valora. Sí el de examinar la conciencia y el agradecer a los colaboradores más inmediatos, a todo el Clero, a los Religiosos y Religiosas, a los Seminaristas, grupos y movimientos de apostolado seglar de las Parroquias, lo mismo que a las autoridades empeñadas en favorecer el bien común. A todos, su colaboración y su ayuda.

Y formulo nuevamente un ofrecimiento compartido: Que el Señor acepte nuestras vidas, la de todos, como materia apta para el sacrificio eucarístico que diariamente celebramos en la Iglesia y las presente al Padre.

De la mano de Santa María, Madre suya y Madre nuestra, para quien "nada es difícil...".

3. Que mejoren para todos los tiempos duros que nos toca vivir y que, con la llegada del nuevo Obispo, Don Jesús Murgui Soriano, cercano por su origen y con cualidades y experiencia pastoral, con ilusión y esperanza compartidas, sea él quien os ayude, os guíe y acompañe en los próximos años...

Prestadle la colaboración generosa que me habéis ofrecido a mí y que el Señor bendiga los esfuerzos de todos. Ojalá pueda hacerse de uno y otro obispo, del que cesa y del que se incorpora, el elogio que hacía San Agustín: "Merced a estos agricultores, segantes, arquitectos, pastores y proveedores, la Iglesia Santa creció y se propagó". (Contra Julián Pelagiano, II, 37.) Quiéralo Dios.

+ Rafael Palmero Ramos

viernes, 27 de julio de 2012

Nuevo Obispo para Orihuela-Alicante

D. Jesús Murgui, que hasta ahora estaba en la diócesis de Mallorca ha sido nombrado hoy mismo por el Papa Benedicto XVI obispo de la diócesis de Orihuela en Alicante, un obispo con 66 años.

Murgui ha estado al frente de la diócesis de Mallorca desde febrero de 2004. Según noticias de su misma diócesis, lo último que hizo el obsipo Jesús Murgui, el jueves de la semana pasada fue asignar un mismo sacerdote para varias parroquias e intentó aliviar la situación de escasez de sacerdotes recurriendo a los diáconos.

Concretamente, ha reforazado con diáconos 14 parroquias ante la escasez de de sacerdotes. Nombró a cinco diáconos que prestarán servicio en unidades pastorales que agrupan a varias parroquias.
  
Desde hace unas semanas, han venido apareciendo noticias que apoyan los cambios adoptados, no solamente por D. Jesús en Mallorca, sino que vienen produciéndose en  sino también en toda España. Actualmente, según la CEE, en España hay 18.633 sacerdotes para atender a 22.686 parroquias, lo que deja a 4.053 de ellas sin cura propio, informó la semana pasada la agencia Efe.

Es una bendición el seguir trabajando con buenos braceros como D. Jesús, en la viña del Señor. Que el Señor le bendiga a nuestro nuevo pastor y a todos los que estaremos bajo su bastón.

Reseña biográfica de D. Jesús:

Mons. D. Jesús Murgui Soriano nació en Valencia el 17 de abril de 1946. Recibió la ordenación sacerdotal el 21 de septiembre de 1969 y obispo desde el 11 de mayo de 1996. Estudió en el Seminario Metropolitano de Moncada (Valencia) y es licenciado en Teología por la Universidad Pontificia de Salamanca y doctorado en esta misma materia por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.

Fue coadjutor entre 1969 y 1973 y rector, en diferentes parroquias de la archidiócesis de Valencia, entre 1973 y 1993, año en que es nombrado vicario episcopal. Fue Consiliario diocesano del Movimiento Junior entre 1973 y 1979 y Consiliario diocesano de jóvenes de Acción Católica de 1975 a 1979.

Fue nombrado Obispo auxiliar de Valencia el 25 de marzo de 1996, recibiendo la ordenación episcopal el 11 de mayo siguiente. Entre 1999 y 2001 fue Administrador Apostólico de Menorca.
El 27 de diciembre de 2003 fue nombrado por Juan Pablo II Obispo de Mallorca.
En la Conferencia Episcopal Española ha sido miembro de la Comisión Episcopal de Pastoral de 1996 a 1999. Del clero de 1999 a 2005. En la de Liturgia pertenece desde 2008.

lunes, 16 de julio de 2012

La importancia de los diáconos



La Iglesia católica afronta un serio problema de escasez de sacerdotes y vocaciones que deja a miles de pueblos sin párroco propio, una situación que algunas diócesis intentan paliar con la ayuda de diáconos, pese a la desconfianza o desconocimiento de muchos frente a esta figura.

Consagrac. Igles.S.Pedro y S.Pablo de Torrevieja

Los diáconos son hombres, casados o solteros, que se han ordenado en una ceremonia muy similar a la de ordenación de los sacerdotes y que tienen autoridad para realizan muchas de las funciones de éstos, salvo consagrar o absolver los pecados.

Así, un diácono puede bendecir, bautizar, casar, dar la comunión, llevar el viático a los moribundos, presidir la celebración de la palabra o los funerales y ceremonias de sepultura al igual que puede hacer un sacerdote.

"En una situación de falta de vocaciones, los diáconos podrían servir un papel muy importante, pero no les dejan por desconocimiento o desconfianza", explicó el sacerdote José María Estudillo, responsable durante 17 años de la Comisión Diocesana para el Diaconado Permanente de la Archidiócesis de Sevilla.

La figura del diácono estuvo muy presente en los primeros siglos de la historia de la Iglesia pero desapareció en torno al siglo VIII y no se reinstauró hasta mucho más tarde en la celebración del Concilio Vaticano II, en la década de 1960.

En España existen actualmente unos 400 diáconos, la mayoría casados y con hijos, que sirven en más de la mitad de las diócesis españolas a las órdenes del obispo.

Así, en Sevilla hay 53 diáconos permanentes ordenados, en Madrid, 23, y en Jerez de la Frontera 19; en Orihuela-Alicante hay 6 ordenados, sin embargo, son muchas las diócesis en las que sus obispos aún no se han decidido a restaurar el diaconado.
Ordenaciones en la S.I. Concatedral S.Nicolás de Alicante

Según datos oficiales de la Conferencia Episcopal Española (CEE), en España hay actualmente 18.633 sacerdotes para atender a 22.686 parroquias, lo que deja al menos a 4.053 de ellas sin cura propio, hechos que hacen que la figura del diácono vuelva a tomar importancia ante esta falta de párrocos en nuestro país.

Pero la realidad es aún más grave, ya que estas estadísticas no distinguen entre los curas en activo y los de más de 70 años, y existen numerosas parroquias importantes en centros urbanos que cuentan con más de media docena de sacerdotes.

"Los diáconos podrían ser la solución y muchos obispos ya lo han comprendido", en España aún es un fenómeno "muy nuevo" pero que en Italia o Estados Unidos está "muy extendido y no sorprende a nadie".

Y ése es precisamente el lamento de Estudillo, quien cree que si la figura del diácono no se ha extendido más es porque "muchos sacerdotes y obispos no lo ven", pese a que en circunstancias de falta de vocaciones pueden hacer un papel muy importante".

"En todos los gremios, cuando surgen figuras nuevas siempre hay quien desconfía y cree que perderá cuota de poder o protagonismo, pero no tiene por qué ser así", aseguró.

De hecho, varios diáconos consultados lamentan la "desconfianza" de los sacerdotes, "que creen que les vamos a quitar el puesto", dijo uno; "o nos ven como curas de segunda", apuntó otro.
Ordenación diaconal de Ralph en la S.I. Catedral de Orihuela

En España, la mayoría de los diáconos son hombres mayores de 50 años, que han vivido muy cerca de sus parroquias y que, tras la jubilación, han dado el paso y se han comprometido: profesores, abogados, comerciantes, agentes de seguros o periodistas, que han cursado al menos cuatro años de estudios específicos y se han ordenado diáconos.

Como Julián Manzano, un montador-soldador de la metalurgia que, cuando tuvo que abandonar su profesión por incapacidad, se lanzó a estudiar y con 52 años se ordenó diácono.

Tres años más tarde es responsable de siete parroquias de Lérida por encargo del obispo ya que, como subrayó, "no estamos a las órdenes de un cura, estamos al servicio del obispo".
Manuel Cosme en Igl.Sag.Corazón de Torrevieja
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Gerardo Dueñas, un ingeniero industrial de 37 años, casado y con 2 hijos, que es diácono en Madrid y sirve en la Parroquia de la Luz, también vivió la sorpresa de sus vecinos al verle en el altar, vestido "casi de cura" y leyendo el evangelio en misa. Dueñas explicó que la labor de los diáconos se centra en el "ministerio de la palabra", que incluye la dirección de catequesis y grupos de oración; la litúrgica, con la celebración de ceremonias como bautismos, bodas o entierros, y la de caridad, lo que lleva a muchos diáconos a ser responsables de las Cáritas locales.

"Lo que no vamos a hacer nunca es sustituir a los sacerdotes, son órdenes distintas y además, somos poquísimos así que, a nivel pastoral, no vamos a solucionar nada", dijo tras señalar que, en Madrid hay más de 1.500 sacerdotes y sólo 23 diáconos. "Y hay trabajo para todos", afirmó Gerardo Dueñas.
Noticia tomada de la Agencia Efe.

lunes, 9 de julio de 2012

Fortaleza para el camino.


Entre los días 2 al 6 de Julio hemos realizado los Ejercicios Espirituales, los que con carácter anual realizamos los Diáconos Permanentes ya ordenados así como los aspirantes a su inminente ordenación.

Este año los Ejercicios se han realizado entre el Seminario Teologado de Alicante y la Casa Sacerdotal a la que acudíamos para el servicio de comedor y en algún momento concreto a la Capilla.

Normalmente desde que se iniciaron estas tandas de ejercicios anuales, hace ahora unos cincoaños, se han venido realizando en la Casa de Ejercicios de Guadalupe, de la Diócesis de Murcia. Sin embargo, se propuso hacerlos en nuestra diócesis, y concretamente hemos tenido la gran suerte de poder estar cerca del Director del Diaconado Permanente, nuestro queridísimo D. Jose Antonio Berenguer Cerdá; que como todos saben, pasa últimamente por un delicado estado de salud. Y queríamos estar cerca de él para posibilitar su participación en la medida de lo posible, y el Señor en su benevolencia quiso que acompañado de su inestimable Mercedes concelebrara la Eucaristía de apertura y celebrara la de clausura. Fueron dos vivencias Eucarísticas especialmente entrañables.

También D. Rafael, nuestro Obispo quiso compartir su tiempo con nosotros, y se sumo al rezo de Vísperas del martes día 3 de Julio. Durante la oración D. Rafael nos dirigió unas palabras  de aliento y pidió que tuviéramos especialmente en cuenta durante los momentos de oración a D. Jose Antonio y también a D. Juan de Dios Mira, que al siguiente día sería intervenido quirúrgicamente. En la foto aparecemos: D. Rafael Palmero, obispo; a su lado Francis a la derecha de la foto, y Joaquín a la izquierda de la foto, diáconos; arriba, Alfonso, derecha y Federico, izquierda, serán ordenados diáconos el 29 de Septiembre; y arriba del todo Ralph, diácono y D. Ricardo Juan, presbítero y director de los Ejercícios. Posteriormente se incorporó Manuel Cosme, diácono, pero se movió y no salió en la foto.

El buen fin de los ejercicios fue encomendado a D. Ricardo Juan Garcia, rector del Seminario de Orihuela que los dirigió con extrema delicadeza y sana exigencia cogiendo el método ignaciano de Ejercicios como base y desde él, estructurar lo que con tanto celo nos impartió. El sentimiento general fue de gran y santo aprovechamiento a pesar de los momentos en que nuestras humildes capacidades nos llevaban a la dispersión.

Supo D. Ricardo ponderar muy bien nuestras necesidades y todos los participantes le manifestamos allí nuestro agradecimiento y lo confirmamos en esta crónica.

martes, 3 de julio de 2012

Comida de la familia diaconal de Orihuela-Alicante


Comida del Curso 2009
Como todos los años, los diáconos permanentes y los que se están preparando para ello, sus familias y los formadores, hemos celebrado el fin de curso, como se hace por estas tierras; con una comida de hermandad y fue el sábado 30 de Julio, en la Casa de Espiritualidad Diego Hernández de Elche, donde solemos hacer los retiros nosotros y nuestras esposas.

Después de los saludos iniciales, pasamos a la capilla, donde tuvimos un rato de oración y pidiendo por todas las necesidades de la diócesis, recordamos a los dos compañeros que en Septiembre serán ordenados diáconos permanentes, a los sacerdotes enfermos, a los miembros de nuestras familias que han partido a la Casa del Padre y por tantas necesidades que nos preocupan.
Comida del Curso 2010

Terminada la oración, en el porche de la casa de ejercicios, estuvimos conversando amigablemente, formadores, esposas, hijos y nosotros y llegada la hora de las comida, pasamos al comedor, donde junto a las parejas que estaban realizando un cursillo prematrimonial, compartimos una apetitosa comida, servida por las buenas religiosas que gobiernan la casa.

La jornada, sirvió para hablar, rezar, reír, compartir, brindar y degustar los manjares que nos prepararon, pero sobre todo para ir fortaleciendo la pequeña familia diaconal diocesana.

Comida del curso 2011
La reflexión de la Palabra de Dios y de los documentos pontificios, confirma nuestro convencimiento de ser familias apostólicas, que  nos compromete en la pastoral parroquial, junto con nuestras esposas e hijos más mayores.

Al igual que cualquier familia, las dificultades económicas, los problemas familiares, la enfermedad, la diferencia de pensamiento de algún hijo, no falta entre nosotros, pero gracias a Dios: “Yo se en quién he puesto mi confianza” (2Tim 1,12).

En estos años de estudio y preparación, nuestros formadores, nos han mostrado que sólo de la mano del Divino Maestro, podemos servir a la Iglesia, en el lugar donde el obispo nos destine, ayudando a nuestros sacerdotes en su misión de apacentar el pueblo de Dios, amándolo: “Como Cristo amó a la Iglesia y se entregó a sí mismo por ella” (Ef 5,25).

martes, 29 de mayo de 2012

¡ Nos vamos a ejercitar !

Efectivamente, los diáconos de nuestra diócesis y los dos aspirantes que serán ordenados, DM este mismo año, nos iremos de Ejercicios Espirituales este verano.

La novedad es que los haremos en nuestra diócesis. Tal y como teníamos previsto, será en el edificio del Seminario Mayor en Alicante, y el director que nos dirigirá será el Rvdo. D. Ricardo Juan García, rector del Seminario Diocesano de Orihuela; desde el 2 al 6 de Julio.

Esperemos que el Señor nos envíe su Espíritu y haga de nosotros, estos hombres casados y ordenados, hombres ejercitados en la fe, la oración y el amor.

Pidamos, por ellos, por el director espiritual y por nuestro responsable D. José Antonio Berenguer, el fruto abundante para que el Señor moldee esos corazones encallecidos y maduros de servir a los demás.

¡ Que así sea!.

martes, 8 de mayo de 2012

Sed bienvenidos, diáconos de Tai Wan.

En Tai Wan se promocionarán el diaconado permanente

Aunque parezca que está muy lejos de nuestra diócesis, pero están en la misma linea y en sintonía con el  futuro de este ordo recientemente instaurado aquí y en tantas otra diócesis.
Noticia tomada de Fides/InfoCatólica. Decisión tomada en su Asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal de Tai Wan, que ha decidido promover la formación y posterior ordenación de diáconos permanentes casados ​​para responder a las actuales necesidades pastorales, así como para afrontar el envejecimiento del clero y la escasez de vocaciones al sacerdocio.
Según informa Catholic Weekly, “después de casi un siglo y medio de evangelización, la Iglesia particular de Taiwán nunca ha establecido el diaconado permanente de los casados. En cambio, en Hong Kong y Singapur existe desde hace mucho tiempo, y tienen más experiencia”.

Conferencia Episcopal de Tai Wan
Además, la Conferencia Episcopal Regional de Tai Wan ya ha enviado a sus miembros a Hong Kong para estudiar su experiencia. Según los Obispos, en el futuro, los diáconos permanentes se harán cargo de las iglesias que no tienen sacerdote residente, entre las más de 600 iglesias de la isla de Taiwán. Al mismo tiempo, la Iglesia de Taiwán también pretende responder a las necesidades de algunos campos específicos, de los cuales los sacerdotes no pueden ocuparse, como por ejemplo la administración financiera y patrimonial, la información, etc. Así que en el futuro, a los diáconos permanentes casados ​se les ​pedirá una segunda licenciatura después de la de filosofía y teología. 

Por lo tanto, se ha decidido que la Archidiócesis de Tai Pei actuará como “diócesis piloto” para este fin, invitando a la diócesis de Hong Kong a enviar un experto para ayudarla. Además, la Conferencia Episcopal Regional de Taiwan ya ha enviado a sus miembros a Hong Kong para estudiar su experiencia 

sábado, 5 de mayo de 2012

¿Por qué los diáconos?

En el libro de los Hechos de los Apóstoles, San Lucas nos habla de la institución de los diáconos de una forma estable y permanente, por las necesidades de la Iglesia creciente, para ellos se  impusieron las manos  y se les encargó el oficio de administrar los bienes de la comunidad cristiana (cf. Hch. 6,6). 

Será San Pablo el que posteriormente los mencione como una institución estable en la Iglesia (cf. Flp 1,1; 1Tim 3,8-12), llegando a afirmar con una bella metáfora que "hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo;  y diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo; y diversidad de acciones, pero Dios es el mismo, que obra todo en todos" (1Cor 12).

Efectivamente, es una acción del Espíritu Santo el establecer en la Iglesia una diversidad de ministerios dentro de la unidad de una misma misión. Luego si surgen y están surgiendo estas vocaciones en la Iglesia, no es capricho personal, ni es promovidas por ningún prelado más vanguardista o de otro calificativo. 

Fue hace casi cincuenta años, en el Concilio Vaticano II, cuando se acordó con el consentimiento del Romano Pontífice conferir el diaconado a hombres maduros, aun estando casados y jóvenes idóneos que se mantengan  en el celibato (cf. LG 30).

En la misma Constitución Conciliar, y apoyándose en una cita del  Concilio Tridentino se afirma que el ministerio eclesiástico es de institución divina, no humana, y se ejerce en la Iglesia desde bien antiguo por los Obispos, presbíteros y diáconos (cf. LG 28). 

El número 29 de la misma Constitución, afirma que este ministerio eclesial, el diacono, es el grado inferior de la Jerarquía, se les ordena, recibiendo la imposición de las manos "no para el orden al sacerdocio, sino para el orden al ministerio". De esta manera, los diáconos son confortados con la gracia sacramental, en comunión con el Obispo y su presbiterio. A partir de este momento servirán al 
Pueblo de Dios en el ministerio de la liturgia, de la palabra y de la caridad. 
Mi ordenación diaconal, cuando D. Ildefonso me puso la estola y la dalmática.

Prosigue señalando de oficio propio de los diáconos, que pueden administrar solemnemente el bautismo, reservar y distribuir la Eucaristía, asistir al matrimonio y bendecirlo en nombre de la Iglesia, llevar el viático a los moribundos, leer la Sagrada Escritura a los fieles, instruir y exhortar al pueblo, presidir el culto y oración de los fieles, administrar los sacramentales, presidir el rito de los funerales y sepultura. 

Especialmente estos hombres se deben dedicar a los oficios de la caridad y de la administración, y ejercer los oficios necesarios en la vida de la Iglesia. Así, cada Conferencias territoriales de Obispos, y de acuerdo con el mismo Sumo Pontífice, decidirán si se cree oportuno y en dónde el establecer estos diáconos para la atención de los fieles. Por eso no se ha instaurado en todos los continentes al mismo tiempo, ni siquiera en todos los países, cada obispo lo ha instaurado según ha visto conveniente. En nuestra diócesis de Orihuela-Alicante se aprobó el 3 de Junio del 2000 por el Consejo Presbiteral.

Por eso sería bueno que los diáconos no se les viera como un cuerpo extraño e independiente, no van por libres. Si anuncian o predican, no hacen su propio mensaje, sino el Evangelio de Jesucristo; si dan de comer al Pueblo de Dios, es el Cuerpo de Cristo que se quedó en la Eucaristía, si bautizan o bendicen es para aumentar y santificar el número de los redimidos. Es bueno ver que estos hombres, la mayoría casados y padres de familia, tienen un gran corazón, generoso, entregado y partido entre dos esposas, y a ver cual de ellas le pide más.

Oremos, los cristianos, al Dueño de la mies que haga surgir vocaciones para seguir trabajando en su viña, y que su divino Espíritu siembre en sus corazones la vocación al sacerdocio y al diaconado.

Manuel Cosme García Vaíllo
Diácono.